El biministro de Energía y Minería, Juan Carlos Jobet, anunció la suspensión del recargo de energía adicional o límite de invierno y la medición de “horas puntas” durante la época de otoño-invierno, aplicando ambos solo en junio y julio. ¿Pero, qué es lo que debemos tener en cuenta de este anuncio?
El académico de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Concepción y doctor en Ingeniería, Luis García, establece que esta información tiene injerencia en dos sectores, ya que el límite de invierno está enfocado al sector residencial y el de horas puntas al empresarial-industrial. En ambos casos, y en un año normal, este periodo abarca desde abril a septiembre.
“No es que suba el precio de la energía, sino que simplemente como junio y julio son un poco más fríos en los hogares colocamos calefacción eléctrica por ejemplo y consumimos más, y ese sobreconsumo, puede superar el valor que está dado para cada cliente en función gasta en promedio y si supera ese valor te van a cobra más caro. Este año sarán solo dos meses, lo cual es bueno” dijo García.
En el caso de la industria también es importante, porque el horario punta está establecido de 18:00 a 22:00 horas y el precio de la potencia en estas horas es casi siete veces más que el pagan durante el día, entonces muchas empresas se desconectan de las compañías eléctricas y echan a andar sus generadores con combustibles y de esa manera disminuyen sus costos. “Al no haber hora de punta en abril mayo, agosto y septiembre, tienen un menor gasto en energía o en combustible, pueden continuar trabajando normalmente en esos meses, de manera que no tengan un sobrecosto”.
El horario de punta y el límite de invierno lo establece el Ministerio de Energía y tiene su razón porque normalmente los meses de invierno normalmente aumente el consumo de energía eléctrica y alguien tiene que pagar esa infraestructura que se utilizan solo unos meses y alguien tiene que pagar eso, entonces nacen los meses de punta. El año pasado también hubo una reducción del límite debido a la crisis sanitaria provocada por la pandemia.
La pandemia hizo que el consumo total del país se redujera en cifras importantes, ahora hay un repunte, pero sigue habiendo un menor consumo que un año normal, comenta el académico, precisando que, “las empresas no están produciendo a plena capacidad, por lo tanto la demanda energética se redujo, esto significa que los ¨conductores” están siendo utilizados menor al 100 por ciento por lo tanto hay una holgura que está disponible, por lo tanto no es válido cobrar por algo que está disponible”.
Pero en tiempos de pandemia ha aumentado el consumo eléctrico domiciliario
-Desde el punto de vista de las empresas que generan, cuando ves todo generando a nivel país, el efecto es que ha disminuido, porque las empresas que consumen la energía no están produciendo, pero si hacemos un zoom y nos vamos a las casas ahí ha aumentado el consumo claramente. En abril del año pasado publicamos un estudio en el que vimos los consumos febrero, marzo y abril de 2020 y había un claro aumento de un 10 a un 15 por ciento de los residenciales, el reflejo de la pandemia hizo que el consumo de la energía eléctrica en los hogares aumentara, pero eso en el total como sistema eléctrico es menos ese crecimiento a la rebaja en sector industrial, por eso el tema ahora de la holgura, que tengamos liberación del límite de invierno y del horario punta.
¿Qué beneficios trae para los hogares?
-El beneficio es claro es que vamos a pagar menos, en marzo y abril ya tenemos bajas temperaturas, uno comienza a calefaccionarse un poco más con consumo eléctrico y ese aumento de energía va a salir a precio normal y no va a haber un monto más alto donde el precio más alto significa pagar casi el doble por el consumo que aumentaste, entonces la implicancia que tiene para el bolsillo de los clientes residenciales es que justamente no se te va a incrementar el pago a la factura total porque tu limite no existe. En junio y julio hay que tener cuidado de limitarse un poco, porque ahí pue subir la cuenta de la luz.
Algunos consejos
-Se vio en la pandemia al permanecer en la casa el acceso a los electrodomésticos, sobre todo el refrigerador pasa abierto todo el día, para sacar alguna cosita o simplemente abrirlo para mirar y luego cerrar la puerta. Esta acción hace que la temperatura del refrigerador cambie y que la exigencia aumente, por lo tanto también lo hace el consumo eléctrico.
El calentar agua con más frecuencia también es importante, quizá se puede calentar agua y guardarla en un termo.
Utilizar la lavadora con la carga completa, la secadora igual.
Las lámparas que uno tiene que son de bajo consumo, uno se descuida y la deja encendida, igual debe apagarlas.
Eso va a permitir reducir el consumo de energía eléctrica y en parte ordenarte para no superar el límite de invierno.